HistoriaAunque estuvo ocupado desde la era neolítica, el territorio del actual Hong Kong permaneció al margen de los principales acontecimientos acaecidos en la China imperial durante la mayor parte de su historia. No se convertiría en un centro de atención mundial hasta el siglo XIX.
Ocupada por el Reino Unido al final de la Primera Guerra del Opio en 1841, la isla de Hong Kong fue cedida formalmente por China el año siguiente por el tratado de Nankín. Parte de la adyacente península de Kowloon (al sur de la actual Boundary Street) y la isla de Stonecutters fueron cedidas a Gran Bretaña en 1860 por la Convención de Pekín tras la Segunda Guerra del Opio. La superficie de la colonia aumentó de manera significativa con la incorporación a la misma de los nuevos Territorios (incluidos New Kowloon y la isla de Lantau), arrendados a Gran Bretaña por 99 años desde el 1 de julio de 1898 hasta el 30 de junio de 1997.
Según el acuerdo firmado por la República Popular China y el Reino Unido el 19 de diciembre de 1984, la Declaración Conjunta Sino-británica, el territorio completo de Hong Kong bajo gobierno colonial británico se convirtió en la Región Administrativa Especial de Hong Kong de la República Popular China el 1 de julio de 1997.
En la Declaración Conjunta, China prometió que bajo la política "un país, dos sistemas" propuesta por Deng Xiaoping, el sistema económico socialista en China no se aplicaría en Hong Kong, que mantendría su sistema y estilo de vida capitalistas durante 50 años (hasta 2047). La Ley Básica de Hong Kong acordada en la Declaración Conjunta deja a Hong Kong un alto grado de autonomía en todas las materias, a excepción de las relaciones exteriores y la defensa.
El último gobernador británico de Hong Kong, Chris Patten, llevó a cabo una cierta democratización de las instituciones de Hong Kong en los últimos años de soberanía británica. Esto provocó bastantes momentos de tensión entre el gobierno de la República Popular China y el Reino Unido. Tras la retrocesión a China, el empresario naviero Tung Chee-hwa se convirtió en el jefe ejecutivo de la Región Administrativa Especial de Hong Kong.
En 2003, la preocupación por un proyecto de ley anti-subversión que, según muchos habitantes de Hong Kong, erosionaría la libertad de prensa, de religión y de asociación consagradas en el artículo 23 de la Ley Básica, llevó a la calle a medio millón de personas en una manifestación celebrada el 1 de julio de ese año, la protesta más grande dirigida contra el gobierno en la historia de Hong Kong. La impopularidad del gobierno de Hong Kong y la crisis económica fueron también factores de descontento entre la población.
El 10 de marzo de 2005, Tung Chee-hwa presentó su dimisión como jefe ejecutivo. Tung abandonó el puesto dos días después, el 12 de marzo de 2005. Fue sustituido por Donald Tsang, el secretario jefe de administración de Hong Kong, que ocupó el cargo de manera interina hasta el 25 de mayo, momento en que fue brevemente sustituido por otro jefe interino durante la breve campaña electoral. Tras la votación restringida a 800 electores, Donald Tsang fue confirmado como jefe ejecutivo, con una amplia mayoría de votos a su favor. En el 23 de marzo de 2007 ganó de nuevo las elecciones frente a Alan Leong. Su mandato durará hasta la primavera de 2012.
Imagenes